Esta imagen del archipiélago canario está cerca de convertirse en la fotografía del año de la Tierra vista desde el espacio. Esta captura del satélite Terra ha llegado a las semifinales en el torneo participativo organizado por la NASA, en el que todos los visitantes de su página web pueden votar la que para ellos es la mejor fotografía de nuestro planeta. En esta veraniega imagen, las siete islas que componen el archipiélago parecen deslizarse sobre el océano Atlántico, dejando tras ellas una larga estela. Esta se debe en realidad al impacto de los vientos Alisios contra la costa norte de las islas, que deja en el extremo opuesto una zona de calma sin apenas oleaje. El sol se encontraba tras el satélite en el momento en que tomó la fotografía, lo cual explica los peculiares reflejos sobre la superficie del mar.
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Esta imagen satelital muestra una parte de la cordillera del Himalaya localizada a 8 kilómetros al sur del monte Everest. Situada al noreste de Nepal, en Asia, es la cadena montañosa más alta de todo el planeta, que alberga a su vez el pico de mayor altura, el Everest, con 8.848 metros. Esta no es la única cumbre elevada que podemos encontrar allí, ya que al menos una docena más superan los 7.000 metros, por lo que están cubiertas de nieve perpetua y son el hogar de miles de glaciares. Imja, visible en la parte superior de la imagen, es uno de ellos. Según las observaciones, este glaciar retrocede a gran velocidad, perdiendo 20 metros de longitud al año. |
Esta vista aérea de Europa con un cielo despejado fue capturada por el satélite de la Agencia Espacial Europea (ESA) Proba-V, encargado de cartografiar la cobertura del suelo y el crecimiento de la vegetación a lo largo de todo el planeta. La imagen del satélite en miniatura es a su vez una combinación de diversas imágenes tomadas en los espectros de luz azul, roja e infrarroja, ideales para el monitoreo de los bosques y aguas continentales. La fotografía abarca una extensión de 2.250 kilómetros, y en ella se aprecia claramente la nieve sobre las cumbres más altas de los Pirineos y los Alpes.
Esta captura del satélite Envisat muestra las regiones montañosas del norte de Ecuador. En la zona superior izquierda de la imagen, se aprecian en color blanco las afueras de la capital del país, Quito, una de las ciudades más elevadas del mundo, ya que se encuentra a 2.850 metros sobre el nivel del mar. También se observan dos volcanes: Cotopaxi y Antisana. Los diferentes colores son fruto de la combinación de los datos recogidos por el radar del Envisat en tres ocasiones distintas, por lo que ponen de manifiesto los cambios acaecidos en el terreno, siendo las zonas menos coloridas las que se han mantenido inmutables.
El satélite Aqua de la NASA tomó esta fotografía en el espectro de luz infrarroja mientras sobrevolaba los lagos de agua dulce situados en la frontera entre EE.UU y Canadá. La congelación de los Grandes Lagos ha alcanzado niveles históricos con un 88 por ciento de superficie helada, a causa de la ola de frío extremo que azota el noreste del país desde hace meses. La formación de hielo ha sobrepasado este porcentaje en tan sólo cinco ocasiones a lo largo de cuatro décadas. Una vez que empieza a formarse la fina capa en la superficie del lago, las temperaturas frías persistentes, con o sin viento, son el factor principal en el engrosamiento del hielo. En la imagen, el agua que permanece en estado líquido aparece de color negro azulado.
Esta imagen satelital de color falseado muestra el arroyo Kumbumbu, localizado al norte de Australia, a 260 kilómetros al suroeste de la ciudad de Darwin. La vegetación aparece teñida de color rojo y el cauce del riachuelo, de color verde, lo que le otorga un parecido razonable con las ramas de un árbol. El lecho de agua de escorrentía desemboca en el Mar de Timor, que no aparece visible en la imagen. La fotografía fue tomada por el satélite Kompsat-2 cerca del final de la estación seca y el consiguiente inicio de la estación húmeda, durante la cual, las áreas de color neutro de la imagen, se convierten en marismas inundadas.
Esta imagen satelital ha revelado la romántica forma del lago Miscanti, situado en el norte de Chile junto a otro lago más pequeño conocido como Miñiques. El agua de la laguna es salobre, lo que significa que es más salada que el agua de los ríos pero no tanto como la del mar. Esto se debe a la salinidad del suelo; al oeste de la fotografía se encuentra el Salar de Atacama, el mayor depósito salino del país. Debido a la altitud de la meseta limítrofe y a la falta de contaminación lumínica, el desierto de Atacama es uno de los mejores lugares del mundo para la observación astronómica. Guarda además un gran parecido con el planeta Marte, de manera que la Agencia Espacial Europea (ESA) prueba allí algunos de sus vehículos espaciales. La fotografía fue tomada por el satélite japonés ALOS.
Aunque las pistas de esquí de los Juegos Olímpicos de Invierno entren dentro de la categoría de “doble diamante negro”, no son tan empinadas como parece en esta imagen tomada por el satélite Terra de la NASA. La estación de esquí Rosa Khutar se sitúa a 30 kilómetro de Sochi, la ciudad rusa que albergó este año los JJ.OO., y es visible a la izquierda de la imagen, en las laderas de umbría de las montañas del Cáucaso. El instrumento fotográfico de alta resolución ASTER, que viaja a bordo del satélite, obtuvo esta imagen a partir de sendas imágenes tomadas en el espectro de luz visible y en el espectro de luz infrarroja. El color rojo de la fotografía corresponde a la vegetación, el blanco a la nieve y el gris a la infraestructura turística.
Esta fotografía fue tomada por la tripulación de la Estación Espacial Internacional (ISS) mientras sobrevolaba el sur de Mauritania. El ángulo oblicuo de la toma permite advertir las sombras de las extensas columnas de nubes que atraviesan el tercer desierto más grande del mundo tras la Antártida y el Ártico. Bajo dichas nubes, podemos ver la escarpada meseta compuesta de rocas sedimentarias. En la zona central de la imagen distinguimos un campo de dunas onduladas cuya alineación responde a la dirección del viento, que en esta zona sopla desde el noreste. La arena de las dunas móviles procede de los lechos de ríos y lagos secos, si bien algunos ríos todavía fluyen a través del desierto (tan solo una vez cada década) y depositan sedimentos a su paso.
Esta imagen de falso color tomada por el satélite japonés ALOS muestra el monte Kilimanjaro, situado en la frontera entre Kenia y Tanzania. Con una elevación de 5.895 metros sobre el nivel del mar, este volcán durmiente es la montaña más alta de África. Los contrastes cromáticos de la fotografía permiten diferenciar con claridad las desigualdades del paisaje, cada vez más afectado por la deforestación. El color rojo resalta las zonas de mayor riqueza florística, junto con las parcelas agrícolas y los ríos. La sección superior de la imagen está en cambio dominada por llanuras propias del sur de Kenia.
Vanutu es un país insular situado al nordeste de Australia compuesto en su mayoría por islas volcánicas. Dos de ellas, Gaua y Ambrym, emiten con frecuencia gases sulfúricos a la atmósfera. Esta imagen fue tomada por el satélite Aqua de la NASA mientras sobrevolaba la isla Ambrym a principios de año. En ella observamos una extensa niebla volcánica (esmog) que se propaga en dirección oeste-este a través del Océano Pacífico. Este fenómeno se produce cuando los gases expulsados por un volcán activo reaccionan con la luz solar, el oxígeno y la humedad. La franja de color plateado que atraviesa la fotografía de norte a sur no es, en cambio, un fenómeno ambiental, sino que se trata del destello generado por la luz solar sobre la superficie del océano.
En la parte occidental de África se encuentra el pequeño país de Guinea-Bissau. Como se puede apreciar en esta imagen su costa es realmente espectacular, plagada de manglares, lo que la convierte en una zona de alimentación perfecta para aves, animales y peces, constituyendo un fantástico foco de biodiversidad. En la parte izquierda de la imagen podemos ver el archipiélago de Bissagos, un grupo de unas 80 islas declarado Reserva de la Biosfera de la UNESCO en 1996. Además, en la imagen tomada por el satélite Landsat-8, podemos ver la desembocadura del rio Geba con Bissau, capital del país, en mitad del estuario del mismo de color marrón en la parte ligeramente superior de la imagen.
Espectacular imagen del oeste de Europa de noche tomada por el astronauta André Kuipers desde la Estación Espacial Internacional. En la parte derecha de la imagen podemos ver el oeste de la península Ibérica, con Portugal en primer plano. A la izquierda de la instantánea se observa claramente una ciudad más iluminada que el resto: París.
En sólo dos cordilleras, el Himalaya y el Karakórum, se concentran los 14 únicos picos que superan los 8.000 metros de altitud del planeta. El más alto es el monte Everest y su nombre lo toma del geógrafo galés George Everest, a pesar de que su nombre en nepalí es Sagarmatha, que significa “madre del universo”. Los primeros en coronar el Everest fueron Edmund Hillary y Tenzing Norgay el 29 de mayo de 1953. En la imagen tomada por la NASA podemos observar parte de la cordillera del Himalaya completamente nevada, y aunque es difícil imaginar en esta imagen cenital la inmensidad de estas montañas, nos ofrece una perspectiva muy especial de este lugar único.
En esta imagen tomada por el satélite NOAA's GOES se puede apreciar Estados Unidos tapado por el vórtice polar. Se trata de un área persistente de baja presión que normalmente se encuentra sobre los polos pero que, al desplazarse hacia el sur ha llevado al norte del país una ola de frío que está asolando diversas ciudades. En Chicago, por ejemplo, se han registrado temperaturas por debajo de los -40 grados centígrados mientras que en Detroit han visto bajar el mercurio de los 35 bajo cero. Los expertos esperan que se mueva nuevamente hacia el norte y Canadá a finales de esta misma semana. De momento ha afectado a más de 140 millones de personas de 26 estados distintos, provocando más de 4.000 cancelaciones de vuelos, cortes de luz, y más de una decena de muertes (de manera directa o indirecta).
Si estuvieras en la Estación Espacial Internacional (la ISS por sus siglas en inglés) orbitando alrededor de la Tierra, un día despejado de noche, verías la ciudad de Valencia como en la imagen. La nitidez de la imagen permite apreciar el contraste entre el caso antiguo y la cuadrícula de calles que lo rodean. En la parte superior se aprecia perfectamente el puerto de la ciudad que sirve tanto de rompeolas como de plataforma para la descarga de buques. Las luces blancas y azuladas de la parte de debajo de la imagen pertenecen al aeropuerto y a diversas zonas industriales de la ciudad.
Así ven el atardecer los miembros de la Estación Espacial Internacional. La superficie de la Tierra, el espacio exterior, la fina capa de la atmósfera y el brillante sol se perfilan perfectamente en esta fantástica fotografía. La imagen fue tomada por la tripulación mientras el transbordador espacial Atlantis, de la misión STS-129 se anclaba a la ISS.
Perteneciente a Venezuela, esta isla está situada a unos 20 kilómetros de la costa del continente y en realidad está formada por dos penínsulas unidas por una estrella franja de tierra, como se aprecia en la imagen. La zona es el hábitat perfecto para el mantenimiento de los manglares, lo que le convierte en el lugar ideal para vivir para garzas, flamencos, ostras, etcétera. La fotografía fue tomada en 2010 por el satélite japonés ALOS gracias a su radiómetro avanzado en el visible y en el infrarrojo cercano, AVNIR-2. Desgraciadamente ALOS dejó de funcionar de forma inesperada en abril de 2011, mientras evaluaba los daños provocados por el tsunami que acababa de azotar las costas de Japón.
Bonus: Planeta Marte: En la imagen se aprencian los flujos de lava que han dejado dos erupciones volcánicas en las llanuras de Marte. La zona de la fotografía es la región de Daedalia Planium, cuyas llanuras han sufrido numerosos flujos de lava en los que cada uno va cubriendo al anterior. En esta ocasión la lava tuvo un obstáculo en el camino, un islote, obligándoles a rodearlo. Gracias a las distintas capas que se van solapando erupción tras erupción, los científicos planetarios pueden reconstruir y estudiar la actividad volcánica del Planeta Rojo.
Fuente: DiarioDeCuyo.com.ar